En Zaragoza tenemos la suerte de contar con el Cierzo, un aire indómito e indomable que domestica a toda persona que habita en la capital aragonesa y alrededores.
Este viento intenso y constante ha vencido incluso a nobles celtas, acostumbrados a las tempestades atllánticas de Galicia.
Quizá por este motivo, Zaragoza sea tierra de buenos Coaches que ayudamos a las personas a "capear el temporal" y sacar la mejor versión de si mismas.