La sociedad educa y enseña mucho más que la escuela. Los niños aprenden observando y, sobretodo imitando lo que han visto, de manera que se interiorizan comportamientos y actitudes, por lo tanto debemos estar atentos y atentas a nuestros gestos y actitudes cotidianas, pues somos un ejemplo, para los más pequeños, aunque no nos demos cuenta.
¿Qué enseñamos a los niños fuera de las aulas?
Uno de los comportamientos o hábitos que, en mi opinión, se debe enseñar a los niños y niñas es el de irse a la cama a una hora determinada, para que su desarrollo físico, psíquico y emocional sea el adecuado.
En este artículo voy a tratar de explicar como adquirimos el hábito de irnos a la cama, varias generaciones de españoles, y como se refleja en ello la sociedad de aquella época y la repercusión que ha tenido, eso, en nuestra sociedad actual.
A raíz de leer un interesante artículo en el blog Yo fui a E.G.B., sobre las síntonías de la tele con las que nos mandaban a la cama, me he decidido a escribir este artículo de opinión.
La televisión ha sido un gran modelador para el aprendizaje de hábitos y rutinas, para viarias generaciones de españoles, entre los cuales tengo la suerte de encontrarme.
La Familia Telerín
En 1964 comenzaron a asomarse a las pequeñas pantallas de muchos hogares españoles, la entrañable Familia Telerín, una ráfaga y sintonía de dibujos animados, creación de los hermanos Santiago y José Luis Moro, con la que Televisión Española, ponía fin a la emisión de la programación infantil. Vamos a recordarla:
Esta familia apareció todos los días de manera ininterrumpida en las pantallas de TVE desde 1964 a 1971, a las 20:30 horas, en invierno y a las 21:00 horas en verano.
¿Qué se refleja de la sociedad de la época?
En el vídeo vemos a 6 niños con pijama y descalzos desfilando de manera militar de derecha a izquierda de la pantalla. En Espaaña en aquella época, había una Dictadura Militar, basada en el miedo, la sumisión y el acato a la autoridad.
El mostrar las imágenes de derecha a izquierda, le indica a nuestro cerebro que debe ser sumiso y sin ganas de batallar o hacer frente a lo que se le ordena, de hecho, cuando el más pequeño de los nños, trata de escaparse, saliendo de la pantalla, una mano lo manda de vuelta a ocupar su puesto en la fila.
Las imágenes van reforzadas por la canción pegadiza de los niños, que no deja muchas alternativas.
"Vamos a la cama, para descansar, para madrugar", lo que no deja claro es el para qué había que madrugar.
El vídeo termina con todos los niños en actitud cristiana y de rezo, pues en aquella época, la religión, más que como una libertad propia de cada persona, era tenida por el estado como algo de obligado cumplimiento.
Vemos que en aquella época las familias eran numerosas con varios hijos y estancias espaciosas, o esta es la impresión que se quería dar de que "España iba bien".
Los Televicentes
En el año 1974, con el fin de la Diictadura en España, llegan a las pantallas de Televisión Española los míticos "Televicentes", con un mensaje muy claro de fin de la programación infantil y en el que se combinan por primera y única vez en este tipo de mensajes de TVE, dibujos animados con imágenes reales de niños, (con los rostros sin pixelar), viendo la tele y aplaudiendo.
Los Televicentes acompañaron los sueños de los niños españoles, desde 1974 a 1977 y ya eran unos dibujos en color. Os invito a ver el vídeo:
Este anuncio de TVE iba dirigido a todos los televidentes, incluidos los niños, con el mensaje claro, se termina la programación infantil y empiezan las emisiones para adultos.
Las imágenes en color, muestran unos niños preparándose ellos mismos para irse a la cama, poniéndose su pijama e incluso aseandose, pues desean irse a la cama, por ello, les indican a los adultos de la familia, presentes en la vivienda con ellos, su intención: "Nos vamos a descansar, poned más baja la tele, tenemos que dormir mucho, para estar mañana alegres"
Esta ráfaga muestra una sociedad española de cambios y de libertad. Los niños saben valerse por si mismos, toman decisiones y las llevan a cabo.
Este anuncio refleja el Baby-boom de España de mediados y finales de los años 70, justo con la llegada de la Democracia.
Estos dibujos muestran la importancia de la familia, en el diálogo de las niñas con los adultos de la casa. Familias numerosas, con gemelos y mellizos, en una sociedad más industrializada, en la que las viviendas parecen ser más reducidas de tamaño, a juzgar por las imágenes finales, en las que aparecen los niños acostados en una litera, cama para varias personas en un espacio reducido.
Cabe destacar la importancia de las mascotas familiares. Estos niños tenían un loro del cual, parecen responsabilizarse, pues al irse a dormir, ellos mismos, le tapan la luz, para que el pájaro también pueda dormir, aunque esta medida no es del agrado del loro.
Aunque en estos dibujos los niños ya no adoptan la posición de rezo, sigue presente la figura de un dios cristiano, más protector que amenazador, por lo que pueda pasar, pues la última frase de la canción es: "¡Hasta mañana!, ¡Si Dios quiere!".
Casimiro
Con la llegada de los años 80, con una sociedad española que aprendía a ser libre y a desarrollar su propia creatividad, aparecía en las pantallas de TVE, justo antes de la segunda edición del Telediario, un personaje carismático y muy querido por los niños de los 80, "Casimiro".
Casimiro, vivió en la programación de TVE, desde 1980 hasta 1984. Era un cavernícola peludo y de color naranja que vivís en una cueva, junto a varios insectos que empleaba como utillaje.
Casimiro, que a juzgar por el nombre, parece tener sueño, se prepara hasta la cama y sigue un completo ritual para irse a dormir, en el que hasta muestra a los niños de la época, la importancia de lavarse los dientes, "con mucha pastita y agua corriente". Vamos a recordar su alegre sintonía:
En esta sintonía es notable el final amenazador de la canción. Casimiro, ya acostado en su cama, se incorpora, para advertir a los niños que si no se acuestan entonces, les va a cantar otra vez la canción, lo cual generó varios casos de miedos nocturnos en los niños de la época.
Casimiro vive sin adultos y hasta la fecha se desconoce que tuviera familia, reflejo de una sociedad ocupada y preocupada en la libertad individual de cada persona.
Telín, Telén, Telón
En 1987 llega el turno de "Telín" y "Telén", dos niños de dibujos animados, protagonistas de la ráfaga infantil de la época, que parecían estar al cuidado de la televisión y de los demás muebles de la casa. Aquí está su sintonía:
Telín y Telén, junto a su mascota, un gato-reloj, llamado "O ´Clock", aparecieron en las pantallas de TVE, hasta 1990, año del nacimiento de las cadenas privadas de televisión en España, con lo cual la hora de irse a dormir los niños, pasó de la libertad a la anarquía.
Si ahora se habla del internet de las cosas, con "Telín y Telén" tuvimos un prototipo, pues son reflejo de una sociedad,en la que los niños o estaban solos en casa, titulo de una película de la época, o estaban al cuidado de la televisión, siendo los aparatos los que indicaban el ritmo de vida a los niños, con las consecuencias que eso ha tenido, en la denominada "Generación Ni-Ni"
Es destacable la figura de "Mami Cama", que acoge entre sus pechos maternales a los dos pequeños ¿Quizá quieran suplir la ausencia de alguien importante en la vida de un niño?
También se nota la importancia que empieza a tener el inglés en la educación española, si nos fijamos en el nombre del gato.
Los Lunnis
Hasta 2001 no se vuelve a tener una sintonía característica con la que los niños se fueran a la cama en España, Los Lunnis eran unos muñecos que monopolizaron la programación infantil de TVE de la primera década del siglo XXI, en un intento de crear un "Barrio Sésamo Made in Spain". Os invito a recordar su melodía:
Estos seres vivían en el planeta "Luna Lunera" y se iban a la cama a ritmo de blues, cantando con palabras de adulto, lo que habían hecho a lo largo de todo el día, motivo para irse a la cama.
Al contrario de lo que ocurría con "Telén y Telín", estos niños si parece que están al cuidado de cuatro personas adultas, dos personas ancianas, guiño a la importancia y dedicación que tienen los abuelos en nuestra sociedad, al cuidar a los nietos, mientras padres y madres están en el trabajo, y dos jóvenes, un chico y una chica, que reflejan el papel de los "Canguros" cuando no hay abuelos y los padres tienen que trabajar.
Los Lunnis "se fueron a la cama" en TVE, hasta 2008, curiosa fecha, por los programas que han aparecido después.
Trancas y Barrancas
En 2008, Cuatro, en el programa "El Hormiguero", de Pablo Motos, toma las riendas de intentar mandar a los niños a la cama con una canción muy pegadiza, a cargo de las hormigas "Trancas y Barrancas":
Esta canción es un tanto curiosa, vamos a analizar su letra:
"¡Vete a dormir! ¡Ya no des más el tostón! y a pegar mocos en el colchón.
Estás muy cansado, tienes los ojos rojos. ¡Tienen sueño hasta tus piojos!
¡Vete a dormir, ya no pintas nada aquí! ¡Y no te olvides de hacer pipi!
¡Vete a dormir, vete a dormir! ¡Qué tus padres quieren vivir!
Creo que NO me voy a ir, que estoy muy a gustico viendo la tele aquí.
¡Tú te vas ahora mismo a a acostar, que el cerebro se te va a secar!
¡Vete a dormir, ya no pintas nada aquí! ¡Y no te olvides de hacer pipi!
¡Vete a dormir, vete a dormir! ¡Qué tus padres quieren vivir!"
Esta letra pone todo el foco de interés en el ego de los padres, trasladando la culpa de todos los problemas que tienen en la vida los adultos, a los niños, que parecen venir al mundo con el fin de complicar la vida. Una escusa que no soluciona nada.
Tono imperativo, que, por supuesto, los niños no acatan, pues a nadie nos gusta cargar con las culpas de otro. Esta canción es ideal para provocar discursiones familiares, que, casualidades de la vida, Cuatro, empezó a enseñar, públicamente con dos programas; "Super Nanny" y "Hermano Mayor", de los que hablaremos en próximos artículos.
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Me ha gustado mucho tu análisis, relacionando los programas que "mandan" a los peques de la casa a la cama con las características de la sociedad de la época. En mi caso...conozco a algunos de los personajes que mencionas pero sólo de oídas. Ninguno de ellos me mandó jamás a la cama. Eran mis padres quienes lo hacían, y mi hermano y yo les dábamos un beso (tras lavarnos dientes, ir al baño y demás) y a la cama sin más. Con mis hijos hacemos básicamente lo mismo...sólo que yo les acompaño a la cama y hacemos alguna rutina en familia. En el blog hablé de ellas...según la edad y la época hemos pasado por música, canciones inventadas que repasaban los acontecimientos del día, lectura de cuentos....
ResponderEliminarUn saludo
Hola!
EliminarMuchas gracias por tu visita y por tu comentario.
En mi caso, vi desde Don Pepino (2º Video), aunque eran mis padres los que me acompañaban y mandaban a la cama, con algunas rutinas, otra cosa es que yo permaneciera mucho tiempo en la cama, (aun con mi movilidad reducida), siempre me las apañaba para salir de la cama, aunque fuera arrastras, sobre todo en las horas de la siesta.
Me alegra que te haya gustado el artículo.
¡Un Abrazo!
Ayyyyy qué recuerdos con Casimiro y La Familia Telerín. Me ha encantado el post ;)
ResponderEliminarJajajaja! ¿Ves como escribir de lo que a uno le gusta, también funciona?
EliminarMe alegra saber que a tí también te ha gustado el artículo, Carolina.
¡Un Abrazo!